Fimosis

Fimosis y frenillo corto

Consiste en un exceso de la piel (prepucio) que rodea al pene, dificultando la exposición del glande (cabeza del pene). Puede comportar problemas en la actividad sexual y dificultar una higiene adecuada. En estos casos, es preferente que el glande se halle parcial o totalmente descubierto.

El diagnóstico se hace por la exploración física y el tratamiento consiste en extirpar el exceso de piel mediante una cirugía realizada con anestesia local y de forma ambulatoria. Una vez extraída el exceso de prepucio, se realizan puntos en toda la periferia del pene entre las partes restantes de piel. La duración de la cirugía es de 20-30 minutos. Se deja un vendaje compresivo durante unos días después de la cirugía y debe desinfectarse la herida con solución yodada durante 4-5 días.

Lo más molesto son las erecciones involuntarias que se producen durante la noche o por la mañana. Para evitarlas es aconsejable poner en contacto el pene o las nalgas con una superficie fría.

La cirugía no suele tener complicaciones, aunque se puede producir un hematoma de forma ocasional.

El frenillo es una bandeleta que se halla entre el glande y el prepucio. Cuando es excesivamente corto, puede lesionarse en el curso de la actividad sexual, dando lugar a un sangrado abundante por traumatismo de la denominada arteria frénica. Ante esta circunstancia debe comprimirse bien la zona de sangrado y acudir al médico. El tratamiento de este problema es la frenuloplastia que consiste en seccionar el frenillo. Es una cirugía muy sencilla que se realiza de forma ambulatoria con anestesia local.