Infección de la vía seminal
La presencia de gérmenes en el semen, procedentes generalmente de la próstata pueden dar lugar a procesos inflamatorios que obstruyan la vía seminal a cualquier nivel. También pueden adherirse a los espermatozoides afectando a su movilidad o a la capacidad fecundante. Los microorganismos pueden favorecer la producción de anticuerpos antiespermáticos con toda una serie de efectos perjudicales que se comentan en el siguiente apartado.
Ante la sospecha de infección de la vía seminal debe realizarse un cultivo de la orina emitida antes de la eyaculación y del semen. En ocasiones puede estar indicado realizar una expresión de la glándula prostática mediante el tacto rectal para favorecer que sus secreciones pasen a la uretra saliendo directamente a través del meato o bien pueden ser arrastradas por la orina. La secreción prostática y la orina post-masaje prostático son analizadas para identificar gérmenes y otras células como son los leucocitos (células inflamatorias). Puede haber alteraciones de la próstata u otros componentes de la vía seminal que favorezcan la infección y pueden ser detectadas mediante la práctica de una ecografía.