¿Son seguros y eficaces los fármacos (Viagra ®, Levitra ®, Cialis ®) para mejorar la erección?
Cuando en el año 1998 se comercializó el primer fármaco efectivo para curar la disfunción eréctil (impotencia, trastornos de la erección), el nombre viagra ® ocupó una gran atención en los medios de comunicación. Una gran cantidad de hombres con este problema, así como sus parejas, podían recuperar su vida sexual. A los pocos días, la buena noticia se oscurecía cuando los mismos medios de comunicación informaban sobre algunos hombres que podían haber fallecido como consecuencia del tratamiento.
De acuerdo a los datos obtenidos en los ensayos clínicos previos a la comercialización del fármaco, los especialistas en el tema se apresuraron a comunicar que no existía una relación clara entre el fármaco y la causa de la muerte de aquellos hombres. Por lógica, cuando tantos hombres siguen un tratamiento, pueden fallecer por cualquier causa y más considerando que la disfunción eréctil afecta mayormente a hombres de edad avanzada que pueden tener una serie de factores de riesgo para sufrir diferentes enfermedades como las cardiocirculatorias. Y así se pudo demostrar en los fallecimientos que se produjeron.
Lamentablemente, las malas noticias difundidas por los medios causaron un impacto negativo en la población, a pesar de haberse demostrado la falta de relación con la toma del fármaco. No obstante, en la práctica clínica los médicos siguieron indicando viagra ®, absolutamente convencidos de los beneficios y la seguridad del fármaco.
Estos fármacos tienen un efecto vasodilatador fundamentalmente sobre el tejido de la erección y los vasos que nutren al pene. En ocasiones este efecto se puede ejercer de manera muy moderada sobre otras partes del organismo, dando algunos síntomas, generalmente muy leves como son la sensación de calor en la cara, cefalea (dolor de cabeza) y supuración mucosa por la nariz (rinitis). Estos trastornos suelen ser transitorios y acostumbran a desaparecer con el tiempo cuando se continúa el tratamiento. Menos del 2% de los pacientes abandonan el fármaco debido a los efectos adversos. Como con cualquier otro tratamiento, es conveniente consultar al médico cuando aparece algún trastorno relacionado con el mismo.
Han pasado los años y millones de hombres en el mundo entero han sido tratados con éxito con viagra ® y con los otros dos fármacos comercializados posteriormente (levitra ®, cialis ®), todos ellos denominados científicamente como inhibidores de la 5 – fosfodiesterasa. Aparte de esta experiencia clínica, se realizaron una gran cantidad de ensayos clínicos, donde de manera reiterada se demostró, sin ninguna duda, la efectividad y seguridad de estos fármacos.
Pero es más, con el tiempo se ha ido demostrando su efecto beneficioso para el corazón y la circulación sanguínea, por lo que podríamos decir que, aparte de su efecto positivo para la erección, estos fármacos tienen una acción cardioprotectora. De forma anecdótica, se comprobó que los hombres que seguían el tratamiento con viagra ®, levitra ® o cialis ® presentaban una menor incidencia de fallecimientos respecto a los que no los tomaban. Incluso aquellos pacientes con problemas cardíacos y disfunción eréctil que no toman vasodilatadores como los denominados nitritos, pueden seguir tratamiento con estos fármacos. Existen algunas otras contraindicaciones para no administrarlos o para hacerlo tomando determinadas precauciones.
Es por este motivo por lo que es tan importante que la indicación de estos tratamientos sea realizada por el médico. También hay que tener en cuenta que la disfunción eréctil puede ser el primer síntoma de enfermedades más importantes para la salud (diabetes, hipertensión arterial, enfermedades del corazón) que pueden ser descubiertas mediante un buen estudio diagnóstico realizado por el especialista.
Estos son motivos suficientes como para no recurrir a la adquisición de estos fármacos a través de internet u otros medios de distribución. Además, esta bien demostrado que en ocasiones, los fármacos vendidos con el nombre de viagra, levitra, cialis u otros no contienen el principio farmacológico o las dosis no son las adecuadas, con las consecuencias que ello comporta.
Aparte de su función sobre la erección, cada día hay mayores evidencias de otro tipo de efectos beneficiosos de estos fármacos. Entre ellos, cabe mencionar la circulación sanguínea (disfunción endotelial, hipertensión pulmonar), el aparato urinario (crecimiento benigno de la próstata, vejiga hiperactiva), la eyaculación prematura, los espermatozoides y otros que están todavía en fase de estudio.
A título de resumen, diremos que los fármacos para mejorar la erección (viagra ®, levitra ®, cialis ®) son efectivos en un gran número de hombres con disfunción eréctil y absolutamente seguros a partir de la evidencia científica obtenida del tratamiento de millones de hombres y de los ensayos clínicos realizados. Además, pueden ser beneficiosos para el corazón y la circulación sanguínea, así como para otras funciones del organismo. Debe ser el médico el que realice los estudios pertinentes, indique estos fármacos en aquellos hombres que se puedan beneficiar de los mismos y no presenten ninguna contraindicación para su administración y proporcione toda la información para conseguir la máxima efectividad.