Vasovasostomía
Cuando un hombre desea recuperar la fertilidad después de haberse realizado una vasectomía tiene la opción de practicarse una cirugía denominada vasovasostomía que consiste en volver a unir los conductos deferentes seccionados o proceder a técnicas de fertilización in vitro con los espermatozoides obtenidos directamente del testículo. La vasovasostomía debe ser practicada por expertos en microcirugía.
Se realiza bajo anestesia local y tiene una duración aproximada de 1.5 horas. En aproximadamente el 90% de las ocasiones se consigue que aparezcan espermatozoides en el semen, lo que permite poder obtener un embarazo por vía natural sin que la mujer deba someterse a todo lo que comporta el procedimiento de la fertilización in vitro (FIV). Además, hay que tener en cuenta que las parejas que optan por esta última técnica solo tienen posibilidad de conseguir el embarazo cuando se aplica esta metodología.
Cuando se consigue restablecer la permeabilidad de la vía seminal existe la posibilidad de obtener el embarazo en cada ciclo natural de ovulación, lo que sucede en más del 50% de los casos. Si después de practicar la cirugía reconstructiva hay espermatozoides en el semen, pero son de mala calidad, siempre es posible utilizar los espermatozoides eyaculados para aplicar en técnicas de fertilización in vitro, sin tener que reintervenir al varón.
¿Cuándo plantearse la reversión de vasectomía?
Cuando después de haberse practicado la vasectomía se desea recuperar la fertilidad para tener mas hijos con la misma o con otra pareja.
¿En qué consiste la vasovasostomía?
En restablecer la permeabilidad del conducto deferente.
¿Cuando se realiza?
Cuando existe una obstrucción del conducto deferente ya sea por una vasectomía o por cualquier otra causa (cirugías inguinoescrotales, inflamaciones, traumatismos, etc.).
¿Qué efectos tiene la vasectomía sobre el testículo y la vía seminal?
La vasectomía no evita que el testículo siga produciendo espermatozoides. Estos son eliminados mediante el sistema inmunológico a través de los denominados anticuerpos.
Cuando la vasectomía ha ocluido totalmente el extremo que procede del testículo, con el tiempo se va dilatando el inicio de la vía seminal constituido por el epidídimo y el segmento inicial del deferente. El epidídimo consta de un túbulo de 300 micras de diámetro y una longitud entre 5 y 7 metros enrollado en unos 6 centímetros.
Si este túbulo se va dilatando por efecto de la presión ejercida por los espermatozoides y una cierta cantidad de líquido que se produce en el testículo y en el epidídimo, puede llegar a romperse con el tiempo, dando lugar a una nueva zona de obstrucción. En estos casos habrán dos niveles obstructivos: el lugar donde se realizó la vasectomía y el epidídimo.
La cirugía reconstructiva en estos pacientes debe realizarse entre el túbulo epididimario y el deferente por debajo del nivel de obstrucción donde se realizó la vasectomía (epididimovasostomía).
¿Qué tipo de anestesia se realiza?
Cuando ha transcurrido un tiempo inferior a 10 años entre la práctica de la vasectomía y el deseo de recuperar la fertilidad, la cirugía reconstructiva del deferente (vasovasostomía) puede realizarse con anestesia local. Cuando el tiempo es superior o cuando se palpa el epidídimo muy dilatado, lo que debe hacer pensar en una posible obstrucción secundaria a este nivel, es mejor indicar una anestesia general o peridural con el fin de realizar una epididimovasostomía (unión entre el túbulo epididimario y el deferente) si es necesario. Esta cirugía es más dificultosa y requiere de mayor tiempo.
¿Cómo se realiza la vasovasostomía?
A través de una mínima incisión en la raíz del escroto (bolsa de los testículos), se libera y expone el conducto deferente. Se extirpa la zona obstruida por la vasectomía y se comprueba la permeabilidad del deferente en sentido hacia la uretra mediante la inyección de suero fisiológico por su luz. Por el extremo del deferente procedente del testículo emana fluído que se analiza de forma inmediata para constatar la presencia de espermatozoides.
Se aproximan los dos extremos del deferente y, bajo el microscopio operatorio, se realizan unos 6 puntos entre sus luces. Posteriormente, se completa el empalme con varios puntos entre las capas musculares que rodean la luz del deferente.
¿Cómo se realiza la epididimovasostomía?
Una vez extirpado el segmento de deferente donde se practicó la vasectomía y se ha comprobado la permeabilidad hacia la uretra, se realiza la apertura del túbulo epididimario. Se comprueba la presencia de espermatozoides en el fluido que emana y se aproxima el conducto deferente. Bajo el microscopio operatorio, se realizan varios puntos entre la luz del túbulo epididimario y el deferente.
¿Cuánto tiempo dura la cirugía?
El tiempo aproximado de la vasovasostomía es de 1.5 a 2 horas y el de la epididimovasostomía entre 2 y 3 horas.
¿Tienen alguna complicación estas cirugías?
Como toda cirugía del testículo, de forma excepcional puede ocasionarse un hematoma (morado) o una inflamación de diferente intensidad que se resuelve en poco tiempo.
¿Cuáles son las medidas post-operatorias?
- Desinfección de las heridas durante 5 días
- Aplicación de frío sobre las heridas durante 2 días
- Tratamiento antibiótico e antiinflamatorio profiláctico
- Suspensorios (para que los testículos no cuelguen por su propio opeso) durante 10 días
- Abstinencia de actividad sexual durante 20-30 días
¿Cuándo se comprueba si existen espermatozoides en el semen?
Aproximadamente al mes de la cirugía se realiza el primer análisis de semen.