Síndrome del déficit de testosterona y cáncer de prostata
Evidencias actuales acerca de la relación entre el tratamiento de reemplazo hormonal en el síndrome del déficit de testosterona y el cáncer de próstata.
Estudios epidemiológicos demuestran la disminución de la testosterona (T) en la edad avanzada, pudiendo dar lugar a una variada sintomatología definida en la actualidad como el síndrome del déficit de T (SDT). A pesar de que el tratamiento de reemplazo con T (TRT) ha demostrado su eficacia en estos pacientes, sigue habiendo un cierto temor para su aplicación debido a conceptos del pasado que apuntaban la posibilidad de que el TRT favoreciera el desarrollo o acelerara un cáncer oculto de la próstata (CaP). Estudios actuales demuestran la falta de relación entre los valores de T plasmáticos y el CaP, habiendo indicios de una mayor prevalencia de esta patología en pacientescon valores muy bajos de T. En estos pacientes, el CaP suele ser más severo de acuerdo a la puntuación de Gleason, se presenta en un estadio más avanzado y tiene una peor supervivencia.
Estudios histológicos prostáticos en pacientes sometidos a TRT demuestran que no hay diferencias significativas en términos de histología testicular, biomarcadores titulares e incidencia neoplásica cuando se compara con placebo.
La prevalencia de CaP en pacientes hipogonádicos en TRT es parecida a la de la población general en el mismo rango de edad (1%). El TRT comporta un aumento del antígeno prostático específico (PSA) y del volumen prostático al mismo valor de los eugonádicos.
Basándose en la seguridad que ofrece el TRT en pacientes hipogonádicos, se ha ensayado en series cortas este tratamiento en pacientes con CaP localizado y tratado con prostatectomía radical o braquiterapia, sin que se hayan demostrado recidivas tumorales.
A pesar de todo lo referido, el TRT se halla totalmente contraindicado en pacientes con CaP no tratado.
A modo de conclusión, puede afirmarse que cada día hay mayores evidencias para perder el temor al TRT en pacientes con SDT, y es fundamental el control trimestral durante el primer año y posteriormente anual mediante el PSA y el tacto rectal.
Acceda al articulo completo del Dr. en Andrlogía Josep M. Pomerol desde el siguiente enlace “Síndrome del déficit de testosterona y cancer de prostata” (pdf)